Campanas de Libertad

un vistazo a lo más interesante de la actualidad

23 octubre 2008

USA: el voto de los católicos.

La pequeña Alexia escribió una carta en el Diario YA denunciando el aborto.

Alexia González Barros, la niña cuya causa está en proceso de beatificación y que ha adquirido actualidad por la película "Camino" de Javier Fesser, escribió una carta al antiguo YA en papel pidiendo a las madres que estuvieran pensando en abortar que no lo hicieran. El texto es emotivo y revela la tremenda bondad y la indudable santidad de la pequeña.

La carta, que fue publicada el 28 de marzo de 1.983 (dos años antes de su muerte), dice lo siguiente:

"Tengo doce años y soy la séptima de mis hermanos. Doy muchas gracias a Dios de haber nacido en una familia donde todos se pusieron muy contentos cuando yo nací. Si mi madre hubiera sido una de esas que quieren matar a sus niños antes de nacer, yo no habría nacido. Me gustaría decirles que no los maten, por favor, porque seguro que alguien adoptaría a esos niños. En nuestra casa seguro que recibiríamos encantados a uno de esos niños que no los quieren". Alexia González Barros. Madrid.

El caso de Alexia ha vuelto a cobrar actualidad por la película "Camino", en la que su director, Javier Fesser, hace una interpretación muy "personal" de lo que fue la vida de la pequeña.

Alexia era una niña normal hasta que el día 4 de febrero de 1985, cuando aún no había cumplido los 14 años, se le diagnostica un tumor maligno que, en poco tiempo, la deja paralítica. Sufre cuatro largas operaciones y una ininterrumpida cadena de dolorosos tratamientos que hacen de los diez meses de enfermedad una dura prueba.

Alexia desde el primer momento, aceptó plenamente su enfermedad, y dio sentido a su dolor ofreciendo su sufrimiento y sus limitaciones físicas por la Iglesia, por el Papa y por los demás, con total generosidad: "Jesús, yo quiero ponerme buena, quiero curarme, pero si Tú no quieres, yo quiero lo que Tú quieras", decía la enferma.

Como narran desde distintos ángulos sus distintos biógrafos, su fortaleza, paz y alegría fueron constantes a lo largo de la enfermedad, como resultado de su fe, esperanza y amor, virtudes vividas ejemplarmente hasta el final de su vida. Mª Victoria Molins describe en su biografía la primera de las operaciones y el inicio de los tratamientos médicos de Alexia, entonces con 13 años:

"Pasó días y noches sin dormir. Cuando el cansancio la rendía, lograba, ya de madrugada, conciliar el sueño, pero sólo a ratos. Fue aquí cuando empezó a mostrarse su fortaleza de ánimo y su conformidad. Nunca se quejó y obedecía absolutamente en todo haciendo los ejercicios de recuperación que le decían. Aunque la cansaban en extremo, nunca se negó a hacerlos".

La causa de beatificación de Alexia fue introducida en Madrid el 14 de abril de 1993 y clausurada solemnemente el 1 de junio de 1994. La fase de Roma comenzó el 30 de junio de ese mismo año. El Decreto de validez fue otorgado por la Sagrada Congregación para las Causas de los Santos el 11 de noviembre de 1994.

20 octubre 2008

El barco de la muerte en Valencia.

03 octubre 2008

Universidad Libre Internacional de las Américas.

La Universidad Libre Internacional de las Américas (ULIA) es un caso único en el mundo universitario. Estamos ante una universidad a distancia, gratuita con vocación de excelencia, de ideario provida, y que funciona al margen de gobiernos y estados. Conduce sus actividades en español, lleva funcionando 8 años y dispone en este momento de una oferta de 9 titulaciones, todas ellas de postgrado.

Hace apenas una semana han lanzado desde su web: http://www.ulia.org/, la oferta de plazas para el curso que comienza el 1 de Enero de 2009. Charlamos al respecto con su iniciador y coordinador general, el profesor de la Universidad de Valencia, José Pérez Adán.

¿Cómo comenzó ULIA?
La Universidad Libre Internacional de las Américas comenzó a gestarse en unas reuniones de académicos y profesores universitarios preocupados por la falta de protección en las leyes de los países así llamados desarrollados, del derecho a la vida. Nosotros veíamos que esto era un síntoma de grave decadencia y tratábamos de ver qué podíamos hacer al respecto. La primera de estas reuniones se llevó a cabo en 1993 en Segovia, España. Seguimos reuniéndonos anualmente y a partir de 1998 ya decidimos realizar estos encuentros en América. En uno de ellos, celebrado el año 2001 en San José de Costa Rica, decidimos fundar ULIA.

¿Cuál es el objetivo fundamental de la Universidad Libre Internacional de las Américas?
El objetivo principal de las actividades académicas que promueve ULIA es ofrecer una capacitación de alto nivel académico que haga posible a sus egresados aportar a la sociedad sólidas bases para la promoción de la dignidad y el desarrollo humanos defendiendo en todo momento por el valor de la vida. Pensamos que sin este reconocimiento de que la vida es lo primero, todo conocimiento es vacuo y engañoso.

¿Qué caracteriza a ULIA?
ULIA es una universidad gratuita. Intentamos dar la oportunidad, a aquellas personas que por diversas razones no pueden desplazarse a los centros del saber en sus países respectivos o en el extranjero, de acceder desde el lugar en el que se encuentran a una formación universitaria de postgrado pionera en su género.
Todos nuestros cursos son a distancia a través de internet. Lo que hacemos es muy sencillo. Se trata de poner en contacto a profesores excelentes que están preparados y deseosos de transmitir lo que saben gratuitamente a un reducido número de alumnos, con esos alumnos que, a su vez, están deseosos de aprender con el único objetivo de saber más, sin preocuparse por la obtención de un título como requisito necesario para ejercer un trabajo remunerado.
Todo el claustro de profesores trabaja ad honorem, de modo desinteresado, ofreciendo su tiempo libre y su experiencia a gentes que la valoran y aprovechan. Por otro lado, todos nuestros alumnos, estudian solo para aprender sabiendo que al final el único reconocimiento que obtendran será el que nosotros mismos le damos.

¿Cuál es la misión de su universidad y cómo contactan con profesores y alumnos?
La misión de la ULIA es la capacitación académica para una cultura de la vida, la solidaridad y la dignidad humanas, en un contexto de libre servicio mutuo y de máxima gratuidad entre profesores, tutores y alumnos.
Quizá alguno pueda pensar que esto es un imposible, que no hay ni profesores ni alumnos así. Nuestra experiencia es, por el contrario, muy distinta. La verdad es que contamos con un claustro de profesores sobrado. Quizá tenga que ver con el auge de la solidaridad, pero la realidad es que son muchos los profesores que están deseosos de regalar una parte de su tiempo ayudando a los demás haciendo lo que mejor saben hacer que es enseñar. Internet posibilita que esto se pueda hacer de la manera más fácil y sencilla posible.
Por otro lado en ULIA tenemos una gran demanda de alumnos. Esto, lógicamente, era de esperar. Nuestros cursos son muy selectivos: solo admitimos entre 20 y 40 por año y por titulación. Para cada plaza ofertada tenemos 100 solicitudes, con lo que es necesario efectuar una cuidadosa selección. Para ello, además de la sintonía con el ideario de ULIA, nos fijamos particularmente en el currículum solidario del solicitante.

¿Nunca se ven las caras, todo se hace a distancia?
Aún a distancia, se pueden ver las caras. No obstante, sí: cada año convocamos un claustro presencial en una ciudad distinta de América. El de este año lo acabamos de tener en Guatemala y el del próximo año será en Lima. Estos claustros son unos momentos entrañables pues conoces a tus compañeros y profesores y ahí se sellan amistades que duran de por vida entre personas de muchos países distintos pero con una idea similar de lo que es la solidaridad humana y la cooperación. Son tres días de estudio y reuniones que valoramos muchísimo. La gran mayoría de nuestros alumnos y profesores hacen verdaderos sacrificios por asistir al menos una vez. Casi todos los claustros efectuados a la fecha están reseñados en www.ulia.org/ficv

¿Cuál es la tipología del alumnado de ULIA?
Hay de todo. Dado el carácter de nuestros cursos en un momento dado, como por ejemplo ahora, solo tenemos 180 alumnos cursando estudios con nosotros. Pero acumulativamente ya son casi 700 los que han pasado por nuestras aulas virtuales y en unos pocos años esa cifra se incrementará notáblemente pues estamos en expansión constante, una expansión impulsada por la solidaridad, que es un recurso inagotable. Por países, entre nuestros egresados están primero los de México, después los de Argentina y en tercer lugar los de España. Entre nuestros exalumnos predominan las mujeres y la edad media de nuestros egresados (téngase en cuenta que se momento solo ofertamos estudios de postgrado) es de 35 años.

Este año ofertan dos titulaciónes nuevas: una maestría o máster en Bioética y otra en Educación de la Sexualidad y Defensa de la Vida, ¿cómo será el futuro de ULIA a años vista?
Nuestra idea es ir paso a paso, año a año. En estos momentos tenemos 8 años de vida y ofertamos 9 titulaciones. Cada curso aumentamos y reconfiguramos la oferta. Por otro lado, la experiencia que vamos obteniendo es muy valiosa. En los claustros presenciales decidimos las innovaciones y objetivos y hablamos no ya solo de lo inmediato sino de nuestras posibilidades a largo plazo.

Nuestros objetivos a muy largo plazo son completar la oferta educativa para todas las edades. A diferencia de la educación convencional nosotros hemos empezado por los más mayores y vamos hacia los más jóvenes. En un futuro más o menos próximo contemplamos disponer primero de una oferta básica de estudios de grado o de licenciatura, y depués disponer también de una oferta para la educación básica de primaria y secundaria a través del sistema de educación en casa, lo que en inglés se llama “homescholling”. A medio plazo, nuestro objetivo es ofertar el grado superior de doctorado.
Todo esto, naturalmente, depende de nuestras circunstancias vitales, y de que encontremos sucesión continua para que los que estamos más involucrados en el proyecto podamos pasar el testigo a otros. Pienso, no obstante, que gracias a Dios, esto está garantizado durante unos cuantos años y que después ya nuestros exalumnos podrán ir sustituyéndonos poco a poco. Sí, creo que el futuro de ULIA y de la labor que desempeña puede contemplarse hoy por hoy con optimismo. Se trata de algo que fue una idea y que es ahora una realidad prometedora.